César
Más gasolina
por Miguel Rodríguez Casellas
El estado libre asociado de Daddy Yankee habló: “No apoyo la plataforma del Partido Republicano, pero voy a votar por McCain”.
A la estética bugarrona le sigue una ética bugarrona que viabiliza el ser sin serlo. Es boricua esta cuestión. Se cría uno en eso. Se aprende a ser infiel, pero yo la quiero. A copiarse en el examen, pero yo estudié. A que lavar dinero político no es malo porque todo el mundo lo hace. A yo no soy racista, pero...
Daddy Yankee tiene derecho a votar por McCain. A fin de cuentas ambos quieren más gasolina, que es lo que une al liderato republicano antes que el control de los orificios del cuerpo, otra de sus muchas causas benéficas.
Coca quería la nena, gasolina era la contraseña. Gasolina quiere McCain, la lucha contra el terrorismo es pretexto.
El más morón no puede ser Daddy Yankee cuando las comparadas de tarima incluyen a George W. Bush. Brilla Daddy Yankee en todo caso. Elocuente pacto de ultraconservadurismo gringo y lumpenería boricua ha gestado el insigne embajador puertorriqueño.
No hay condón que resista esta embestida visual. El problema es de uno, que no encuentra el control remoto a tiempo para bloquear toda esa transparencia pornográfica de pactos bilaterales y acuerdos.
Hampona es la estética del Daddy, presidencial la del héroe de guerra que se ha quedado sin pelea. A los dos les gusta la guerra, y se visten de ella, para las gradas, para las cámaras, para los panas del punto, desde Irak a la Gabriela.
La pasividad del público es lo que apesta. A Ricky Martín lo instalaron en el penthouse más caro del infierno por inseminar a distancia. Al Daddy Yankee, que se lo sacó en público y meó al País entero desde el escenario, le rien la gracia. No hay doble estándar, es que aquí no los quieren patos. Los prefieren macharranes, gatilleros y republicanos.
Santini debe ganar.
1 comentario:
Me encanta que utilize cierta rima al estilo callejero pero tambien mezcle con palabras de Academia. Mensaje corto pero intenso, totalmente una burla pero se le nota la seriedad del asunto. Además, demuestra dominio del tema político, algo que, por más que yo lea al respecto, no siento que lo "domino" para hacer este tipo de texto.
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